En definitiva, la pedalista tapatía Jessy Salazar dio a conocer que no competirá en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, pues mediante un video anunció que no acepta el llamado de última hora que hizo la Federación Mexicana de Ciclismo a la prueba de velocidad, posibilidad que le había sido arrebatada en un evento celebrado en el Code Paradero hace unas semanas.
“Mi intención jamás será dañar los sentimientos de alguien más. Anímicamente me encuentro destrozada, perdí de la noche a la mañana la ilusión que me levantaba día a día a dar lo mejor de mí y por más que me duela, hoy decido no aceptar”.
Con voz triste, y con algunas lagrimas, Salazar agregó que: “Me destrozaron física y mentalmente. Primero Dios nos veremos en París 2024. Ni mi equipo ni mi gente ni México ni yo nos merecemos a una Jessy Salazar debajo de su 100 por ciento, mi sueño no se merece llevarse a cabo a medias, no sería justo ni para mí ni para mi País”. (Por Martín Navarro Vásquez)