De acuerdo con las leyes de Bolivia, la segunda vicepresidenta del Senado, Jeanine Áñez, debe asumir la Presidencia tras la renuncia de Evo Morales y convocar a elecciones en un plazo máximo de noventa días.
En medio de la grave situación política y social que atraviesa el país sudamericano, todas las autoridades que forman parte de la cadena de sucesión constitucional, el vicepresidente, la presidenta del Senado y el jefe de Diputados, renunciaron a sus cargos.
La Organización de Estados Americanos, calificó como fraudulento el pasado proceso electoral que le había otorgado el triunfo a Evo Morales para un cuarto mandato.