México ha colocado más fuerzas de seguridad en su frontera sur para detener el aumento en la llegada de migrantes centroamericanos que buscan arribar a Estados Unidos, indica la Casa Blanca.
La vocera presidencial, Jen Psaki, informó que el gobierno mexicano confirmó que mantiene un despliegue de 10 mil soldados, la cifra más alta de la historia del país.
Esto se suman, al incremento de las redadas para detener a los inmigrantes que transitan ilegalmente hacia Estados Unidos.