La coordinadora del Comité Universitario de Análisis de Personas Desaparecidas de la UdeG, Carmen Chinas, indica que no solo aumentó la desaparición de adolescentes, entre los 15 y 19 años de edad, sino que, incluso, disminuyó la tasa de localización
“Porque en lugar de ir aumentando la cantidad de personas que pueden ser localizadas ha ido disminuyendo y bueno, esto también es preocupante. No sabemos, porque la autoridad no ha hecho un análisis de contexto o una investigación que explique por qué ahora este rango de jóvenes está en alto riesgo y porqué el promedio por mes de personas desaparecidas, por ejemplo, en ese rango de edad, entre 15 y 19 años, ahora es mucho más alto”.
Insiste en que antes el rango de edad de los jóvenes desaparecidos fluctuaba entre los 25 y 29 años, sin embargo se disparó en adolescentes.
La UdeG considera que puede tener relación con el reclutamiento forzado como el del Rancho Izaguirre. (Por Gricelda Torres Zambrano)
