El Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) aumentó de cinco a ocho las prisiones federales utilizadas para albergar a migrantes detenidos, incluyendo el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, conocido por sus precarias condiciones.
Según el Buró Federal de Prisiones, el cambio responde a un acuerdo con ICE para apoyar objetivos de política migratoria, sin precisar cuántos migrantes están bajo custodia ni su estatus legal.
Organizaciones como Legal Aid Society critican la medida por el hacinamiento y las limitaciones de acceso a representación legal.
Este lunes, un detenido del ICE falleció en el Centro Federal de Detención de Miami en circunstancias aún no esclarecidas.
