El partido Morena en Jalisco anunció que acudirá a la Suprema Corte, organismos de derechos humanos y entidades internacionales para frenar el aumento del 9.65 por ciento en las tarifas del agua aprobado por el Congreso local.
Erika Pérez García, presidenta estatal del partido, calificó el ajuste como un castigo al pueblo y denunció que responde a un modelo de privatización del agua iniciado en administraciones pasadas.
“Hoy alzamos la voz, porque se ha consumado una traición a Jalisco, el Congreso del Estado, junto con Movimiento Ciudadano y una alianza perversa de otros partidos políticos, autorizaron, una nueva ofensiva en contra de uno de los derechos humanos más fundamentales, el acceso al agua; lo que ocurrió no es menor, se ha permitido la entrada de actores privados a la gestión del agua, una acción que no solo violenta el espíritu de nuestras leyes, sino que atenta directamente contra el bienestar y la dignidad del pueblo jalisciense”.
Señaló que el incremento es desproporcionado frente a la inflación proyectada y carece de sustento técnico público.
Acusó corrupción y uso político del sistema hídrico, exigiendo un modelo que garantice el derecho al agua.
