A partir de este martes 11 de noviembre, México aplicará aranceles de entre 156 por ciento y 210.44 por ciento a las importaciones de azúcar provenientes de países miembros de la OMC, excepto aquellos con acuerdos comerciales vigentes.
La medida, publicada en el Diario Oficial de la Federación por el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, busca proteger a la agroindustria nacional ante la caída de precios internacionales y la sobreoferta del producto.
Los nuevos gravámenes reemplazan las tarifas fijas previas y dependerán de la clasificación arancelaria: 156 por ciento para azúcar de caña y hasta 210.44 por ciento para azúcar líquida refinada e invertida.
Según la Secretaría de Economía, la decisión cumple con los compromisos internacionales y cuenta con aval de la Comisión de Comercio Exterior, con el fin de estabilizar el mercado interno.




