El incremento al impuesto actual y al nuevo gravamen que se plantea en el Paquete Económico 2026 para las bebidas azucaradas provocará un incremento de precios al consumidor de entre 10 y 15 por ciento, lo que afectará al bolsillo de las familias, advierte la Asociación Mexicana de Bebidas.
Explica que se trata de un impuesto altamente regresivo, pues los hogares de menores ingresos destinan tres veces más recursos a los refrescos y bebidas saborizadas que los hogares de mayores ingresos.
