Aunque se trata de una prueba piloto, en la ciudad ya se puede observar la señalética de color amarillo que advierte sobre todo a los peatones, ciclistas e incluso motociclistas sobre un bache o agujero lleno de agua que puede resultar más hondo de lo previsto y por consiguiente más peligroso al pasar sobre él.
Sin embargo, la idea no es de las autoridades sino del Colegio de Arquitectos por el Desarrollo Sustentable de Jalisco, cuyo presidente Jorge Fernández Acosta explica.
“Porque detectamos que el agua alcanza niveles de 2 metros y medio en el punto más complicado entonces la gente pasa de un charquito y piensa que son 30 centímetros avanza y el agua se lo lleva”.
Se trata de discos amarillos colocados en los postes con la figura de un auto y ondas simulando olas debajo de él.
Por lo pronto Estos ya se colocaron en las colonias Santa Ana Tepetitlán y El Rosario como prueba piloto. (Por José Luis Jiménez Castro)
