El Banco de México redujo en 50 puntos base su tasa de interés de referencia, para ubicarla en 8.5 por ciento, a pesar del aumento de la inflación en abril al 3.93 por ciento.
Este es el tercer recorte consecutivo de medio punto porcentual, en un contexto de débil desempeño económico.
Banxico justificó la decisión por la fragilidad de la actividad económica y dejó abierta la posibilidad de futuros ajustes dependiendo del comportamiento inflacionario.
