En una verdadera plaga se ha convertido el robo de cables y rejillas por toda la ciudad, nada se salva, ni las estaciones del Tren Ligero, ni los túneles vehiculares, ni los cruceros semaforizados.
Los últimos episodios del vandalismo urbano ya tocaron el túnel vehicular de avenida Prolongación Federalismo y Periférico Norte, el que amanece nuevamente a obscuras al igual que el crucero de Periférico Sur y Vía Manzanillo donde apenas el viernes habían restaurado los cables; hoy ya se los volvieron a robar.
También las rejillas de avenida López Mateos al ingreso de Bugambilias.
Los respiraderos de avenida México y Abedules y los cables del túnel del Tren Ligero de avenida Colón y Lázaro Cárdenas, todos estos víctimas del vandalismo. (Por José Luis Jiménez Castro)