El presidente estadounidense, Donald Trump, asegura que no habrá pausa a los aranceles que entraron en vigor el pasado miércoles, pese al caos que ha provocado la medida en Wall Street y las bolsas de todo el mundo.
Lejos de ello, amenazó a China con otro arancel de 50 por ciento, si Beijing no retira el impuesto de 34 por ciento anunciado el pasado viernes a los productos estadounidenses.
La Casa Blanca confirmó que si Trump cumple su nueva amenaza, los gravámenes se dispararán a 104 por ciento; es decir, los productos chinos importados costarán el doble.
