El gobierno de Estados Unidos aplicará un arancel del 17 por ciento a la mayoría de los jitomates frescos provenientes de México, tras el fin del acuerdo comercial que evitaba esta medida desde 2019.
La decisión se tomó luego de que las negociaciones bilaterales concluyeran sin éxito.
Productores estadounidenses afirman que el impuesto busca proteger su industria, mientras que empresas con operaciones en México advierten que encarecerá el producto para los consumidores.
México abastece actualmente el 70 por ciento del jitomate que se consume en el mercado estadounidense.
