La inflación en Estados Unidos se desaceleró más de lo previsto en noviembre, luego que el Índice de Precios al Consumo registró un aumento interanual de 2.7 por ciento.
La cifra se ubicó por debajo del 3.0 por ciento observado en septiembre, último mes con información completa debido al cierre prolongado del gobierno federal.
El dato refuerza la percepción de una moderación en las presiones inflacionarias, en un contexto de atención de los mercados a las decisiones de política monetaria de la Reserva Federal.



