La Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de Jalisco continúa una fase experimental para identificar posibles fosas clandestinas a través del crecimiento inusual de plantas, provocado por los minerales que emanan de cuerpos en descomposición.
El método se apoya en análisis previos de terreno, y ya se estudian diversos factores vinculados a la vegetación como señales de alerta.
Al respecto habla Tunari Chávez, encargado de análisis y contexto del organismo.
“Estudiamos por lo menos 10 municipios en este momento, para entender sus condiciones geológicas, sus condiciones edafológicas o de suelo, para entender sus climas, entender sus formas. Entender dónde y cómo se están haciendo las fosas clandestinas, de qué manera cada uno de los elementos de la Naturaleza determinan la posibilidad o no para empezar de hacer una fosa”.
Actualmente se cuenta con cuatro espacios de experimentación forense, donde las pruebas se realizan con cadáveres de cerdos por su similitud anatómica con el cuerpo humano. (Por Edgar Flores Maciel)
