Además de la participación de la delincuencia organizada, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, indica que se investiga la actuación del personal municipal que tenía asignada la seguridad del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, asesinado el sábado primero de noviembre.
“Si bien es cierto que el homicida fue abatido en el lugar, también hay que investigar, en ese momento tenía 8 escoltas personales y 14 de Guardia Nacional, en el momento de lo ocurrido de los hechos lamentables, trágicos y su equipo de seguridad más personal sí fue seleccionado directamente por el presidente. Digamos que el segundo círculo de seguridad inmediata lo brindaba Guardia Nacional”.
Ramírez Bedolla indica que se analiza qué ocurrió para se relajara la seguridad de los escoltas del primer circulo y confianza de Carlos Manzo. Se analiza también la forma tan rápida en que fue abatido el autor material. (Por Gricelda Torres Zambrano)


