El Senado de Estados Unidos aprobó el polémico plan fiscal y presupuestario del presidente Donald Trump.
El proyecto fue devuelto a la Cámara Baja del Congreso para su revisión y voto final, con la presión de remitirlo al mandatario para su firma este viernes.
El plan incluye un gravamen de 1 por ciento a las remesas que envían los migrantes; mientras que en el de la Cámara de Representantes, el impuesto es del 3.5 por ciento.
En la Cámara de Representantes, el plan enfrenta el rechazo de los demócratas y de muchos republicanos que se oponen a los drásticos recortes en salud, energías renovables y programas de ayuda alimentaria.
