Al cumplir los requisitos que marca la ley, no había ningún impedimento para que Palmira y Gabriela adoptaran a un niño de cinco años que permanecía desde su nacimiento en un albergue, sentencia la procuradora de Niñas, Niños y Adolescentes, Euridice Paredes Jaramillo.
“En este sentido, ellas resultan idóneas de acuerdo a las valoraciones que se hicieron y fue así como se integra un expediente, en donde ellas resultan aptas para adoptar a un menor de edad. En ese sentido y una vez cumplimentados todos los requisitos que la ley establece, inician su procedimiento ante la autoridad judicial, quien hace la revisión de todos los documentos y resuelve de manera favorable”.
La procuradora señala que la ley no hace distingos, por lo que la pareja no tuvo un trato privilegiado para acceder a la adopción.
Al igual que el resto de los casos, a este deberá dársele un seguimiento de dos años cada seis meses.
Insiste en que el niño y las adoptantes, están felices. (Por Gricelda Torres Zambrano)