El Vaticano alista dos edificios para recibir a los 133 cardenales que participarán este miércoles en el cónclave que elegirá al sucesor del papa Francisco.
Para garantizar el aislamiento, se ha desactivado la red electrónica dentro de la Capilla Sixtina.
Más de 40 trabajadores, entre carpinteros, herreros, decoradores y personal administrativo, colaboran en los preparativos.
Según la normativa pontificia, los cardenales no pueden comunicarse con el exterior y se deben evitar dispositivos de grabación dentro del recinto durante el proceso de elección del pontífice.
