Antonio Vivaldi y Johann Sebastian Bach son pilares del Barroco, pero con estilos distintos.
Vivaldi, veneciano, destaca por su vivacidad y melodías brillantes, como en “Las cuatro estaciones”, con su carácter descriptivo y ritmos contagiosos.
Bach, alemán, fue un genio contrapuntístico, elevando la complejidad armónica en obras como “El clave bien temperado” y “La Pasión según San Mateo”.
Mientras Vivaldi influyó en el concierto solista, Bach sintetizó tradiciones musicales europeas con maestría matemática.
Ambos dejaron legados inmortales: Vivaldi, con su alegría italiana; Bach, con su profundidad espiritual.
Nunca coincidieron en vida, pero sí en el día de su muerte, un 28 de julio, el italiano dejó de existir en 1741 y el alemán 9 años después en 1750.
