La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación desechó más de 100 impugnaciones contra la validez de elecciones judiciales, incluida la renovación de la Suprema Corte, al considerar que no hubo pruebas suficientes de irregularidades.
El bloque mayoritario, encabezado por la magistrada presidenta Mónica Soto, concluyó que la existencia de “acordeones” o guías de votación no acreditó intervención indebida, uso de recursos públicos o vulneración al voto libre.
El fallo sienta criterio para casos pendientes y ratifica los triunfos impugnados en diversas magistraturas y juzgados del país.
