En el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, el cardenal José Francisco Robles Ortega ofició misa en el Santuario de los Mártires, donde señaló la negligencia, indiferencia y lentitud de las autoridades en la atención a familias de desaparecidos.
Afirmó que solo en Dios puede encontrarse consuelo y respuestas, y pidió orar incluso por quienes perpetran estos crímenes.
Aunque reconoció avances en el actual gobierno estatal, insistió en mejorar la prevención, especialmente en zonas donde el crimen organizado capta a jóvenes mediante engaños.
Colectivos de búsqueda marcharon al Santuario clamando justicia por sus seres queridos.
