A un año del cierre impuesto por Estados Unidos a la exportación de ganado mexicano por la presencia del gusano barrenador, productores y especialistas consideran que la escasez de carne y la inflación en la Unión Americana podrían forzar la reapertura de la frontera.
El bloqueo ha generado pérdidas superiores a 837 millones de dólares para México y una reducción de 300 mil toneladas de carne en Estados Unidos.
La plaga acumula más de diez mil casos en trece estados, aunque autoridades de ambos países reportan avances en su contención.
Organizaciones ganaderas estiman que la reapertura podría darse en los primeros meses del 2026 debido al encarecimiento récord de la carne y la presión de consumidores estadounidenses.



