La ingeniera alemana Michaela Benthaus hizo historia al convertirse en la primera persona usuaria de silla de ruedas en viajar al espacio, tras despegar desde Texas a bordo de una nave de Blue Origin.
La mujer, quien quedó parapléjica tras un accidente hace siete años, flotó en microgravedad durante un vuelo suborbital de diez minutos que superó los 105 kilómetros de altitud.
La compañía informó que la cápsula requirió solo ajustes menores, al haber sido diseñada con criterios de accesibilidad.
Benthaus calificó la experiencia como “la más genial” de su vida.



