La Fiscalía de Michoacán alertó sobre un incremento de jóvenes en las filas del crimen organizado, tal como pasó con el adolescente implicado en el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, quien tenía apenas 17 años.
De acuerdo con el fiscal estatal, Carlos Torres Piña, los menores se llegan a dedicar también a las labores de distribución de droga y gatilleros.
Sin embargo, reconoció que son las mujeres quienes tienen mayor presencia, siendo resultado de trabajos de reclutamiento del crimen organizado.


