El gobierno de la Ciudad de México acordó con transportistas un incremento de un peso con cincuenta centavos en la tarifa del transporte público de ruta y corredor, con excepción del Metrobús.
Como parte del acuerdo, los concesionarios deberán portar licencia tipo “C” vigente, eliminar vidrios polarizados, contar con seguro de responsabilidad civil y mantener visibles las nuevas tarifas y placas.
Con este aumento, los transportistas cancelaron bloqueos programados, aunque señalaron que esperaban un ajuste mayor.




