El exboxeador, Julio César “N” fue deportado por Estados Unidos y entregado a autoridades mexicanas, quienes lo detuvieron por contar con una orden de aprehensión por delincuencia organizada y tráfico de armas.
El detenido de inmediato fue llevado a Hermosillo, donde quedó a disposición del juez federal que giró su captura y fue ingresado a un penal de alta seguridad.
La Fiscalía General de la República lo vincula con presuntos vínculos al Cártel de Sinaloa.
