El Gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum presentó los lineamientos de la reforma que reducirá gradualmente la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas entre 2027 y 2030, sin afectar salarios ni prestaciones.
El secretario del Trabajo, Marath Bolaños, afirmó que la medida mejorará productividad, salud y equilibrio de vida, y aclaró que las horas extra seguirán siendo voluntarias y con pago doble (o triple en los primeros cuatro casos), pero con un límite: la suma de horas ordinarias y extraordinarias no podrá exceder 12 horas diarias.
Además, se prohibirá que menores de edad realicen tiempo extra y se obligará a los empleadores a llevar un registro puntual de horas trabajadas para garantizar su cumplimiento.



