La Policía de Australia informó que Naveed Akram y su padre, Sajid Akram, actuaron solos en el atentado contra una festividad de la comunidad judía en la playa de Bondi, en Sídney, que dejó 15 personas muertas.
La comisionada Krissy Barrett señaló que, tras dos semanas de investigación y cooperación internacional, no hay indicios de una red terrorista ni de dirección externa.
Detalló que el hijo enfrenta 59 cargos, incluidos 15 por asesinato y uno por terrorismo.
El anuncio ocurre un día después de que el primer ministro Anthony Albanese ordenara una revisión independiente para evaluar si el ataque pudo haberse prevenido.
La comisión presentará conclusiones en abril de 2026.


