Los dos integrantes de la Guardia Nacional baleados a una cuadra de la Casa Blanca permanecen en estado crítico, confirman autoridades, quienes desmienten versiones preliminares que los daban por muertos.
Las autoridades califican el ataque como “un espantoso acto de violencia” contra personal desplegado en la capital estadounidense.
Tras el atentado, la Secretaría de la Defensa anunció el envío de 500 elementos adicionales, con lo que la presencia en Washington superará los 2 mil 500 efectivos de la Guardia Nacional.


