Sean “Diddy” Combs fue condenado a cuatro años y dos meses de prisión tras ser declarado culpable de dos cargos de transporte para ejercer la prostitución, en un caso federal que expuso el uso de trabajadoras sexuales y encuentros sexuales a veces violentos y cargados de drogas.
Antes de que el juez dictara sentencia, Combs calificó su conducta pasada como “repugnante, vergonzosa” y “enferma”, y se disculpó con las personas a las que dañó física y emocionalmente, así como con sus hijos presentes.
El equipo de defensa argumentó que los encuentros sexuales fueron consensuados y pidió la liberación inmediata de Combs, quien pasó más de un año detenido, período que lo llevó a recuperar la sobriedad y reflexionar sobre sus acciones. (Por Katia Plascencia Muciño)



