El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos anunció que a partir de hoy, en todos los puertos de entrada y salida, los agentes de la Patrulla Fronteriza tomarán, de manera obligatoria, datos biométricos y genéticos a extranjeros, con el propósito de tener un estricto control migratorio.
La medida incluye personas extranjeras, turistas e inmigrantes: con visa, permisos de empleo temporal, personas con residencia permanente, menores, adultos mayores, es decir, todos los extranjeros sin ciudadanía deberán entregar sus huellas dactilares, escaneo del iris, escaneo de cuerpo entero, registros de su voz e incluso en algunos casos, hasta muestras de ADN, para identificación genética.



