Jorge Armando “N”, señalado como autor intelectual del asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, negó vínculos con el crimen organizado durante su segunda audiencia en el Altiplano.
Afirmó llevar una vida laboral verificable como comunicador, contratista de la Comisión Federal de Electricidad y funcionario municipal, además que rechazó conocer a integrantes de grupos delictivos.
También denunció haber sido detenido sin identificación oficial, incomunicado y torturado.
Su versión contrasta con la Fiscalía de Michoacán y autoridades federales, que lo relacionan con una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Siete escoltas del edil permanecen detenidos por omisión.



